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Por Wilson Díaz Sánchez
Aparte de los pedalazos que lo ratificaron ayer como subcampeón del Tour de Francia-2017, Rigoberto Urán brilló en estos días por su espontaneidad, sencillez y calidad humana.
Sus frases terminaron siendo virales en las redes sociales y fueron titulares de prensa. Todas llevaban implícito su origen, su personalidad y, sobre todo, el sello de un ser humano luchador y visionario.
“Cuando se pierde la originalidad, se pierde la esencia”. Así lo reconoció ayer. Hacía referencia a su estilo descomplicado ante los demás, aunque reconoció que a veces tiene que controlarse frente a las cámaras, “porque se me van muchas palabras”, señaló en diálogo con el Canal Caracol.
“Así soy yo, mis amigos y los que me conocen me preguntan por qué le digo tantas groserías a la gente (marica, güevón). Si los llamo así es porque los quiero mucho o les tengo mucha confianza. Es algo de la casa, del pueblo (Urrao), ese idioma siempre lo hemos tenido”.
Añadió que a pesar de las carreras que se ganen o los triunfos que se consigan, “lo que más importa es lo que haya dentro de la persona”.
Al hablar de su actuación en este Tour, la puso como ejemplo para los jóvenes que también aspiran al progreso. “Es algo que soñé y hace muchos años lo veía imposible, pero creo que muchos de los que están en Colombia pueden lograrlo. Tenemos una cantidad de ciclistas buenos, llegar acá es difícil, pero el que quiera puede conseguirlo”.
Para él, este logro es el más importante de su carrera y espera que vengan muchos más. “Con esto me dan licencia para correr otros cuatro años”, comentó entre risas, quizás pensando en quienes ya lo creían sin fuerzas para figurar en el lote mundial.
Emoción por lo alto
Sobre la competencia, destacó en la cadena ESPN que sabía que llegaba en buen nivel, al lado de un equipo bueno que lo apoyaba. “Fuimos día por día, es una carrera dura, y contamos con fortuna, con buenas piernas y salud que es lo más importante, para terminar como queríamos”.
Reconoció, en cada entrevista, que ganar es complejo y más con un rival como Froome: Lo intentamos hasta que casi nos caemos en la contrarreloj)”. Al final expresó sentirse “como en el aire” y confesó que lo embargaban emociones y sentimientos por tantos años de dedicación, trabajo y esfuerzo, lecciones que les quiere dejar a sus compatriotas. Finalmente agradeció el apoyo dentro y fuera del país. “Gracias mijitos por seguirnos y ya saben, Go Rigo Go”..