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Un golpe en la muñeca, a causa de una caída mientras se entrenaba, prendió ayer las alarmas sobre la presencia de Fernando Gaviria en la Milán-San Remo, el primer monumento del año que se disputa hoy sobre un recorrido de 291 kilómetros.
Sin embargo, su equipo, el Quick-Step, confirmó que el rival más acérrimo de Peter Sagan (Bora), el gran favorito al triunfo en la “Classicissima”, sí estará en competencia.
“A pesar del dolor en su muñeca derecha, comenzará la Milán-San Remo”, confirmó en su cuenta de Twitter la escuadra belga.
Esta será la segunda vez que actúa en la prueba italiana el corredor antioqueño, que esta temporada ha logrado cuatro etapas, la última en la Tirreno Adriático ante el eslovaco Sagan, quien allí hizo doblete y además ganó la Kuurne-Bruselas-Kuurne.
Levantar los brazos en la clásica más larga del calendario es todo un hito del ciclismo mundial, por eso los mejores esprinter y los clasicómanos acuden a esta con deseo de gloria.
El cartel de favoritos incluye el francés Arnaud Démare (FDJ), vencedor en 2016, el alemán John Degenkolb (Trek), ganador en 2015, el noruego Alexander Kristoff (Katusha), en 2014, y el británico Mark Cavendish (Dimension data), en 2009.
Además de Gaviria, aparecen en el listado de inscritos Carlos Betancur (Movistar) y Daniel Felipe Martínez (Willer).
También conocida como la carrera de primavera, la Milán San Remo es uno de los monumentos que siempre ha querido ganar Gaviria, de ahí su valentía para afrontarla, y aún más al saber que en 2016 estuvo a 400 metros de triunfar, pero una caída se lo impidió .