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Ni un pinchazo a mitad de recorrido impidió que el ciclista antioqueño Mauricio Ortega frenara su ímpetu en la décima etapa de la Vuelta a Colombia.
Con valentía, fortaleza y arropado por sus compañeros del equipo Supergiros, no solo mantuvo la calma para recuperar el terreno perdido, sino que en los metros finales, en el ascenso hacia Salento, sitio de meta, propinó un duro ataque difícil de contestar por sus rivales, que le permitió ampliar su diferencia en la clasificación general.
“Estoy muy contento, y más con este equipo que me dio la oportunidad de seguir corriendo cuando los otros me desecharon”, indicó Ortega, quien dio un paso más para conquistar el título que le ha sido esquivo en los últimos años por escasos segundos.
“Aquí estoy presente, lleno de ilusión y confianza para lo que resta”, agregó Mauricio, que le sacó cinco segundos más en la general al español Óscar Sevilla (EPM-Tigo-Une), quien ahora está a siete. Por su parte, Álex Cano (Aguardiente Antioqueño) es tercero a 1.13.
Pero en el giro nacional aún no hay nada escrito. Se vienen tres días determinantes para conocer quién es el hombre más fuerte de la competencia.
El primero hoy, con el trayecto de 173,5 kilómetros entre Salento e Ibagué, con tres premios de montaña, dos de tercera (en los km 7,7 y 84,3) y otro de fuera de categoría, el alto de la Línea (km 33,4), que podría dejar nocaut a más de uno. Por lo pronto, Ortega no deja de soñar .