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El técnico Rubén Darío Bedoya había pronosticado que ante América el Envigado jugaría una final más. Y fue así, porque aunque empezó perdiendo, movió sus fichas y terminó celebrando su cuarto triunfo consecutivo (2-1) como local.
Los tres puntos le permiten escalar posiciones en la tabla de la Liga Águila-2 y seguir con la esperanza de estar entre los ocho.
No quería perder, y por eso para la segunda parte envió al campo a Michael López y Duván Vergara, quienes le dieron lo que le estaba haciendo falta: manejo de balón y poder ofensivo.
Merced a ello, logró remontar el marcador con los goles de Joseph Cox y Yossimar Quiñónes, para ajustar 14 puntos y quedar a uno del octavo (Deportivo Cali, 15 unidades).
“La respuesta del grupo fue muy buena y logramos una victoria importante ante un rival que nos sorprendió en el primer tiempo, pero al cual pudimos superar”, manifestó Bedoya en la rueda de prensa.
Con la tranquilidad del resultado, el técnico tendrá dos semanas para trabajar con el equipo, recuperando algunos jugadores que tienen molestias físicas y pensando en su próximo rival, el Alianza Petrolera como visitante, en la fecha del 17 de este mes.
La deuda del elenco naranja está fuera de casa ya que aún no ha podido ni empatar ni ganar desde que Bedoya asumió como técnico. Por ahora disfruta del triunfo y se ilusiona, junto con su grupo, en alcanzar los puntos que le permitan llegar a los ocho.