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James Rodríguez, que no ha tenido muchos partidos en la Champions esta temporada con el Bayern Munich, pues apenas ha jugado 168 minutos en seis presentaciones, entra esta tarde al cotejo con Liverpool, por los octavos de final, con la presión de las palabras del técnico Niko Kovac.
En la rueda de prensa, antes del compromiso, el estratega dijo que “James está bien últimamente, pero estoy convencido de que puede hacer más. Se esfuerza en defensa, pero aún puede ayudar más y ser más directo con la pelota”.
El equipo alemán se medirá al inglés en una de las llaves más parejas en esta fase. La historia dice que Liverpool ya dejó en el camino a los alemanes, fue en la temporada 1980-81, cuando lo eliminó en semifinales, después de un 1-1 y 0-0. Pasó por el gol de visitante.
A esta instancia, los dirigidos por Kovac entran como primeros del grupo E, mientras los entrenados por Jürgen Klopp sufrieron para pasar como segundos del C, en el cual hicieron los mismos puntos del Nápoli, pero los favoreció el gol diferencia.
Hoy, 3:00 p.m., en el cotejo de ida, el compromiso es sacar un buen resultado en el estadio de Anfield, en el cual muchas miradas estarán puestas en el colombiano (en caso de ser tenido en cuenta por el técnico), que ha estado en tres duelos, pero ninguno completo en la presente edición de la Champions, con un balance de cero goles, 121 pases buenos y 15 balones recuperados.
El Benfica es el elenco ante el que más ha jugado: inició de titular y estuvo 78 minutos, destacando en el triunfo 2-o.
Hoy, Rodríguez, llega con cinco juegos consecutivos como titular en la Bundesliga y la esperanza de una buena presentación ante Liverpool. Ante este onceno jugó cuando integraba el Real Madrid (2014-15). Y en ambas ocasiones, en la fase de grupos, los merengues triunfaron.