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El goleador Juan Fernando Caicedo, en medio de la euforia por el triunfo 2-1 sobre Deportivo Cali en el Atanasio, que significó la cuarta victoria en línea del Medellín, dijo algo muy cierto: “Mientras pasen los partidos y sigamos ganando, más difícil se ira poniendo todo”.
El atacante, que ha marcado tres tantos en cuatro presentaciones y es el máximo artillero del torneo, uno de ellos para iniciar la remontada ante los azucareros ante 23.140 espectadores, manifestó que no le incomoda ser suplente e invitó a sus compañeros a estar tranquilos y a no desbordarse en triunfalismo.
“El Medellín es una familia, a todos nos gusta jugar, pero si me toca estar en el banco en el próximo encuentro lo haré sin problemas, seguiré trabajando para aportar”, advirtió el atacante que ingresó para el segundo tiempo por el argentino Germán Ezequiel Cano.
En el análisis del juego, su compañero Andrés Ricaurte aseguró que en el primer tiempo les faltó movilidad y, al no encontrarla, “equivocamos el camino”.
Al igual que Caicedo, el mediocampista recordó que si bien llevan 12 puntos de 12 posibles, algo que no conseguía el DIM desde el Apertura de 2008, es decir, hace 10 años, no pueden creer que “todo está hecho”. Según él, la intención es seguir practicando un fútbol efectivo en todas las canchas del país, asumiendo los duelos con paciencia y responsabilidad. “Tenemos una buena nómina y hay que seguir luchando por mejorar”.
por ciento de posesión de balón tuvo el Medellín
frente al Deportivo Cali.