viernes
7 y 9
7 y 9
Nacional está por cerrar su libro de contrataciones para el segundo semestre y los únicos temas pendientes son la confirmación de la continuidad del venezolano Alejandro Guerra (compra del 60% de sus derechos deportivos) y la contratación de un volante más, que abre las puertas al regreso de Álex Mejía.
Durante su participación en la Copa América con la Selección Colombia, el volante barranquillero confirmó un contacto que tuvo con los directivos verdolagas, pero explicó que aún no había nada concreto.
Sin embargo, el interés de Santa Fe por contar con él para que reemplace a Daniel Torres, que jugará la Liga Águila-2 con el DIM, habría puesto nuevamente en alerta al conjunto antioqueño, para realizar una propuesta más que acerque a Mejía al club.
El jugador y su familia le darían prioridad a la opción de regresar a la capital paisa, pero si no se llega a un acuerdo el futbolista estaría analizando la propuesta del conjunto cardenal y una opción más para Europa.
“Se debe cerrar lo de Alejandro Guerra y tenemos pendiente definir lo del volante”, manifestó el gerente deportivo del club, Víctor Marulanda.
Pese a que el técnico Reinaldo Rueda ya había expresado que si el paraguayo Pablo Velázquez no se quedaba, le gustaría tener otra opción en ataque, Marulanda dijo, hasta ayer, que lo de un delantero más no se estaba trabajando.
Este viernes Nacional espera tener todo cerrado para encarar los torneos del segundo semestre. Esto, teniendo en cuenta que Dimayor deja un plazo abierto de un mes más para inscribir jugadores después del comienzo del torneo.
De otro lado, se confirmó que Nacional no empezará el torneo este fin de semana y aún no se define la fecha del encuentro aplazado ante las Águilas. También Marulanda desmitio que fueran a jugar en el Atanasio.
Así, el debut oficial del club verdolaga será en el clásico ante DIM de la fecha 2, programado para el fin de semana del 19 de julio.
Esto posibilita que el equipo verde tenga un mayor tiempo de trabajo antes de empezar los torneos, a los que llega con la obligación de pelear el título, tanto en la Liga como en la Copa Águila.