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Luego de una de las peores rachas desde que el seleccionador argentino José Néstor Pékerman llegó a La Selección Colombia de Fútbol de Mayores durante 2016, el 2017 inició con lo justo para la tricolor, con una victoria apretada 1-0 sobre Bolivia.
Tras la derrota 3-0 sufrida en el cierre del año pasado en San Juan contra Argentina, el equipo de Pékerman quedó sexto con 18 unidades. Ahora, tras el triunfo en Barranquilla contra Bolivia, la tricolor llegó a 21 unidades y regresó al grupo de los cupos directos para Rusia-2018 con la cuarta posición.
Brasil manda en el clasificatorio con autoridad y ya clasificado de forma anticipada, al completar 30 unidades, seguido de lejos por Uruguay que cuenta con 23. Luego viene Argentina, que tras el ajustado festejo frente a Chile completó 22 puntos y ahí sigue Colombia (21), para cerrar el grupo de los cuatro países que están clasificados parcialmente la cita orbital.
Pero la disputa está apretada, porque el quinto lugar es para Ecuador con 20 puntos, delante de Chile que también suma 20 unidades, mientras que Paraguay se metió en la pelea al completar 18 positivos tras el triunfo contra los ecuatorianos. Perú (15), Bolivia (7) y Venezuela (6) ya piensan en la cita de Qatar-2022.
Si bien el panorama en el inicio del año es un poco más alentador para la tricolor, porque a pesar del descenso del 2016, que le hubiera costado la cabeza a cualquier entrenador, los puntos le dan tranquilidad al equipo para estar en zona de clasificación, pero todo dependerá de lo que suceda el próximo martes en Quito.
A pesar del triunfo contra Bolivia, la Eliminatoria sigue dejando muchas dudas en Pékerman, desde sus planteamientos, hasta los resultados, por ejemplo, a Bolivia se acostumbraba a golear, como hace cuatro años cuando fue 5-0 y para este jueves se esperaba algo igual, porque el equipo del altiplano llevó a Barranquilla un once combinado entre titulares y suplentes.
Barranquilla fue el fortín de la tricolor en el clasificatorio anterior y hasta ahora no lo ha sido. Camino a Brasil-2014, Barranquilla representó 19 puntos en siete partidos, lo que da un rendimiento del 90%, sin embargo, rumbo a Rusia-2018, cuando faltan dos duelos en Barranquilla, la Casa de la Selección reporta un rendimiento del 66%, que si bien es positivo, está muy por debajo de la anterior eliminatoria y contra Bolivia las dudas continuaron, por el factor diferencia de gol.
Precisamente ese es otro aspecto que no tiene bien a la Selección. La comparación con el camino a Brasil-2014 es inevitable y en esa oportunidad la tricolor marcó 27 goles y sólo recibió 13, mientras que a la fecha 13 de esta edición, ya le marcaron más goles, pues David Ospina sufrió 15 anotaciones y el equipo sólo ha marcado 16, para una diferencia de +1, frente al +3 de Argentina y Chile, y el +5 de Ecuador, los rivales directos.
Mientras en el clasificatorio a Brasil-2014 Falcao era el goleador natural y cerró con nueve anotaciones, seguido por su compañero frecuente, Teófilo Gutiérrez, quien festejó seis, en esta eliminatoria Colombia no ha podido consolidar un delantero goleador, pues los máximos artilleros hasta ahora son James Rodríguez con cuatro y Carlos Bacca y Edwin Cardona, cada uno con tres goles.
Lo que viene
La continuidad del 2017 será larga en tiempo, pero corto en compromisos, porque sólo quedan cinco en el camino, dos en Barranquilla y tres por fuera, con 15 puntos en juego, de los que Colombia debe sumar al menor ocho para estar tranquilo entre los cuatro o seis para sufrir con una opción de repechaje.
Estamos transitando por la primera doble jornada de la tricolor durante este año. El triunfo frente a Bolivia en Barranquilla parecía la esperanza de reivindicación para, no sólo ganar tres puntos, sino también sumar goles y llenar a los jugadores y al país de confianza, pero lo último no se dio.
Ahora se viene Ecuador, el partido para sumar, porque si gana, Colombia daría un paso firme y si empata también, porque es un rival directo al que le quitarían puntos de su casa, pero si pierde, sería dar ventaja y empezar a complicar el sueño mundialista.
Segundo semestre
La penúltima doble confrontación será hasta septiembre, con una particularidad, por primera vez en tres años los jugadores tendrán descanso largo a mitad de año, pues en 2014 hubo Mundial y en 2015 y 2016 Copas Américas y los mejores años de Pékerman en la tricolor fueron precisamente en 2012 y 2013, cuando sus jugadores descansaron en esa época, como lo harán este año.
Y los juegos de septiembre también serán claves. Son las dos semanas más difíciles en lo que queda, porque primero visitará a Venezuela y luego recibirá a Brasil en Barranquilla. Con un valor agregado para el equipo de Pékerman: Venezuela ya está eliminado y Brasil clasificado.
El cierre del clasificatorio será en octubre, con dos partidos para cumplir con el sueño mundialista. El calendario le favorece a la tricolor porque jugará en Barranquilla contra una posible eliminada Paraguay y la última jornada será en Lima, frente a la, ya eliminada Perú.