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Delfines de Medellín se da el lujo de ser la novena antioqueña que ha estado en las dos finales de la Copa Claro de béisbol, porque este año también tiene cupo fijo en Urabá, al lado de otras trece novenas.
“Ya los niños ven que tienen posibilidades de seguir una carrera profesional y se animan. Por ejemplo, se dan cuenta que peloteros como Jordan Galvez y Cristian Palacios fueron firmados por los Filis de Filadelfia y Piratas de Pittsburg por 35 y 85 mil dólares, respectivamente, y esto para ellos es mucho dinero, lo que hace que un deporte como el béisbol se masifique”, dice Alejandro Vega, técnico de Delfines.
Esta novena estuvo en Barranquilla el año pasado y ya tiene la experiencia de este primer torneo y por eso Alejandro cree que en Arboletes, donde se jugará la final, del 24 al 28 de este mes, los resultados deben ser mejores, porque ya son dos años de trabajo.
Delfines, que se eliminó con Los Astros, Yanquis y Envigado, estará acompañado por otros dos conjuntos antioqueños: San Juan de Urabá y Chigorodó.
Su meta este año, es clasificar a la final, aunque la tiene dura, porque se medirá a novenas como Atlántico, Guajira, Magdalena y Valle. “Creo que la experiencia del primer año nos sirve en este segundo para afrontar con más tranquilidad los juegos. Además, se ha mejorado mucho en bateo, que pienso será nuestra fortaleza y en tener más lanzadores”, expresa Vega.