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La nueva batalla de las reinas
Serena y Sharapova, exnúmeros 1,
se vuelven a ver las caras dos años después. Enemistadas y rivales chocan en Roland Garros.
Entre Serena Williams y Maria Sharapova, Roland Garros se dividirá hoy en el choque más esperado de los octavos de final, que pondrá frente a frente a dos estrellas mediáticas, exnúmeros 1 del mundo y que han tenido una gran rivalidad en el pasado.
Serena es, sin duda, la reina del tenis. La marca que le viste, que es la misma que la de la rusa, no se ha equivocado colgando su imagen por todo París con el eslogan “The Queen Is Back” (La Reina ha vuelto).
En el plano deportivo, la estadounidense supera en casi todo a la rusa de 31 años, sobre todo si se compara el palmarés. Williams tienen 23 trofeos en citas del Grand Slam, a apenas una del récord absoluto de la australiana Margaret Court.
En el otro lado de la red, Sharapova ha conseguido ‘únicamente’ cinco ‘grandes’.
En Roland Garros, la estadounidense también supera a la rusa, con tres títulos (2003, 2015, 2016) contra dos (2012, 2014). Y en el balance de duelos entre ambas, los números también hablan por sí solos, con un 19-2 favorable a Serena.
“Las cifras no mienten”, reconoció ayer la propia Sharapova, consciente de que no será la favorita.
Para encontrar la última victoria de la ‘zarina’ del tenis ruso sobre la pequeña de las hermanas Williams, que hoy tiene 36 años, hay que remontarse al 15 de noviembre de 2004. Fue en el Staples Center de Los Ángeles, cuando una joven Sharapova de 17 años se había impuesto en tres sets (4-6, 6-2, 6-4), unos meses después de haber levantado su primer Grand Slam, privando a su rival de un tercer título consecutivo en Wimbledon.
18 triunfos seguidos
¿Y qué ha pasado desde entonces? Dieciocho victorias consecutivas de Serena que apenas ha cedido en ellas tres sets.
“Me gusta su manera de golpear la bola”, afirmó Maria para explicar los motivos de esa impresionante racha, en la cual el anterior enfrentamiento se remonta a 2016, en los cuartos del Abierto de Australia (6-1, 6-4).
“Creo que hay muchos elementos en su juego que son mejores que en el mío”, reconoció Sharapova, que habló sobre su rivalidad con la Williams en su libro “Unstoppable” (Imparable).
“Serena y yo deberíamos ser amigas: tenemos la misma pasión, pero no lo somos”, escribió allí, estimando que el supuesto “odio” de la estadounidense contra ella tiene sus raíces en aquella lejana victoria en Wimbledon.
“Creo que Serena me detesta por ser la chica flacucha que, contra todo pronóstico, le derrotó en Wimbledon, pero por encima de todo, creo que me odia porque la he escuchado llorar”, afirmó.
“Era una final de Wimbledon. Hubiera sido más sorprendente que no llorara”, respondió Williams en conferencia de prensa, criticando el contenido de la obra. “El 100 % del libro está basado en rumores, por lo que he podido leer, las declaraciones y otras cosas; es algo decepcionante” .
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