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En medio de figuras masculinas alistándose para saltar a la pista, la silueta de dos mujeres sobre sus bicicletas sobresalía ante las demás.
Eran Valentina Toro y Samantha Martínez, dos intrépidas corredoras que ayer desafiaron a 70 hombres en el downhill, la última prueba de la Etapa Extrema del Clásico EL COLOMBIANO.
Los cerca de dos kilómetros de la pista adecuada en el parque recreativo Comfama de La Estrella, desafiaron a estas dos chicas que, con menos de un año practicando esta modalidad del ciclomontañismo, ya se destacan.
Valentina, de 16 años, incursionó en este deporte hace 10 meses y en su palmarés ya suma un título de Juegos Departamentales, dos podios en la Copa Antioquia (1° y 2° lugar en damas júnior) y un cuarto lugar en el Latinoamericano de downhill en Panamá.
“Siempre trato de dar lo mejor en los entrenamientos para que en la competencia se vean los resultados”, asegura la arriesgada Valentina, estudiante de grado décimo en el Liceo Antioqueño de Bello.
Eso quedó demostrado ayer, cuando, al abrir la competencia general, no se guardó nada en el escenario para quedarse con el primer lugar.
“La pista era corta pero con mucha dificultad, técnica, rápida. Además hubo un salto complejo, en el que varios compañeros tuvieron problemas”, contó Valentina, que llegó a este deporte tras dejar el bicicrós, disciplina en la que cimentó sus bases para atreverse a practicar downhill.
“Es un cambio radical, porque las bicicletas en las que se practican son diferentes, los saltos también son distintos, pero la resistencia y parte de la técnica que desarrollé en el BMX me ha servido mucho, además ahora tengo más agallas y menos miedo”, sostiene Valentina, virtudes que los hombres resaltaron en estas dos mujeres que, con nervios de acero, se enfrentaron a una de las pruebas más exigentes del Clásico EL COLOMBIANO.