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Con más de 600 mil motos vendidas en el mercado colombiano en el último año, de acuerdo con las estimaciones de la industria, la moto se ha convertido en una alternativa importante de movilidad y de diversión para muchos usuarios.
Pero, ¿cualquier moto le sirve a cualquier persona?
Hay dos elementos que son claves al elegir. Primero, explica Juan Carlos Mejía, director de mercadeo de Auteco, saber cuál es el uso que se le va a dar. Y como segunda pregunta básica, conocer cuál es el presupuesto que desea o puede invertir en su compra, complementa Jorge Herrera, gerente comercial de AKT.
A partir de ahí se puede determinar qué perfil y qué tipo de moto es más conveniente, para realizar una compra acertada.
Un reciente estudio sociodemográfico, desarrollado por la firma Incolmotos Yamaha, y que compartió con EL COLOMBIANO su gerente de marca, Carlos Ovidio Montoya, da cuenta de algunas características básicas del usuario de moto en el país.
El 53,4 por ciento de los compradores de este tipo de vehículos señalaron que la adquieren porque necesitan solucionar un problema de movilidad, para desplazarse de un punto a otro.
Por su parte, el 37,9 por ciento explica que la requieren porque su trabajo lo exige.
El 53 por ciento de los compradores son estudiantes, lo que compagina con la necesidad de movilidad. El 30,7 por ciento hace parte del grupo de independientes. 8,3 por ciento de los usuarios de motos nuevas estudian y trabajan y solo 2,3 por ciento trabaja.
Novato o cómodo (100-150)
Quienes entran al mundo de las motos por primera vez, o quienes con experiencia buscan privilegiar el manejo sin complicaciones, cómodo, desean por lo general una moto de conducción simple, anota Alejandro González, gerente de ventas internacionales de AKT. Motos tipo scooter o moped son las más indicadas. Las primeras son automáticas. Las moped, si bien tienen palanca de cambios, no poseen embrague, que también facilita su operación. Y aunque se encuentran scooter de alta cilindrada, en Colombia en su mayoría son motos hasta los 125 centímetros cúbicos.
Para rodar en el trabajo (125-180)
La moto también es hoy una herramienta de trabajo. Este es un vehículo con unas características de estructura que la hacen más resistentes a un trato más rudo. Suspensiones duras, económicas en consumo para ser más rentables, explica Juan Carlos Mejía. Son motos que van en un rango de 100 a 125 centímetros cúbicos.
Pero si quien trabaja también utiliza el vehículo para su diversión en fines de semana, por ejemplo, requiere una moto con una estructura fuerte, pero también cómoda e incluso con toques de diseño. “Esta moto sí implicará un poco más de consumo”, plantea Patricia Melo, gerente de mercadeo de AKT. El cilindraje puede avanzar hasta los 180, o incluso 200 centímetros cúbicos.
Por pura diversión y pasión (180-250)
Si la moto es un elemento que usted utiliza en especial para salir de viaje, para dedicarse uno o varios días a recorrer las carreteras en viajes cortos o de largo alcance, la elección de la máquina debe orientarse por aparatos en los que es importante una cilindrada alta, por lo menos más allá de los 200 centímetros cúbicos, y que pueden ir a más de 1.000 centímetros cúbicos, usadas especialmente por los amantes de la velocidad. En los viajes de largo aliento las motos van en rangos de 600 a 1.000 cc. En ellas prima la comodidad y agilidad de conducción.