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Hasta 2016 iban siete ediciones del Festival de béisbol y los grandes protagonistas siempre habían sido las novenas de afuera (Valle, Córdoba y Bolívar), así como la mexicana Olmeca que, a pesar de su intento de revalidar su corona, sucumbió, en la final de este año, ante Envigado Cubs.
Los del sur del área metropolitana fueron, esta vez, superiores y, por fin, le dieron a Antioquia un título, gracias al trabajo de este club y del municipio que se unieron para hacer grande esta disciplina.
Pablo Correa y Martín Restrepo, de la novena campeona, fueron destacados como Jugadores más Valiosos. Ambos, salieron felices y exhibiendo el trofeo. “Por fin somos campeones”, expresaron en coro, significando el primer título para Antioquia.
“Nosotros nos habíamos mentalizado para ganar. Nos preparamos muy bien y jugamos varios partidos y campeonatos antes del Festival”, contó Restrepo, quien, a sus 11 años, reconoce que desde muy niño juega béisbol, porque siempre acompañaba a su papá, Juan Camilo, a todos los campos deportivos.
Correa tuvo sus inicios en la Fundación Fedac del Chocó, donde estuvo cuatro años por cuestiones laborales de sus padres, quienes crearon esa entidad “para darle una oportunidad a los niños de una región tan pobre y llena de violencia, de hacer una actividad sana”, manifesta Pablo.
Los dos reconocen que no fue fácil, porque en el camino tuvieron que dejar dos campeones, como Tampa Bay de Cartagena y Olmeca México.
“Nos tocó destronar a dos campeones y eso nos hace más felices, aunque hay que decir que no fue fácil. Pero lo más lindo fue poder darle a Antioquia el primer título”, coinciden los jóvenes peloteros Correa y Restrepo.