viernes
7 y 9
7 y 9
Como si no fuera poco con la crisis alimentaria y de otros servicios en el departamento del Chocó se conoció que la Fiscalía General de la Nación adelanta una investigación contra el gobernador Efrén Palacios Mosquera por una defraudación cercana a los 4.000 millones de pesos en dineros que estaba destinados a la salud.
En revelaciones realizadas por Semana.com, diferentes personas involucradas en el escándalo han dado su testimonio y señalado a Palacios de ser el responsable del desfalco en el que se entregaron millonarias sumas de dinero a propietarios de IPS, médicos, odontólogos, dueños de farmacias y hasta prestamistas para que dispusieran de ellas.
De acuerdo con la publicación de Semana.com, los dineros estaban destinados a pagar los favores recibidos mientras el entonces candidato Palacio aspiraba al cargo en 2013, luego que Luis Gilberto Murillo fuera destituido por el Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, que declaró nula la elección debido a que en 1997 ya había sido condenado. Dicha decisión fue impugnada por el Mandatario seccional, sin embargo, el fallo fue en su contra.
Uno de los testimonios en el que se basa la denuncia contra el Gobernador, que terminará su periodo el 31 de diciembre de 2015, es el de Elpidio Asprilla Guerrero, un exauditor médico de la Secretaría de Salud, y quien fuera el intermediario en varios de los pagos destinados a saldar las deudas del mandatario regional. Hoy en día este hombre se encuentra detenido por esta investigación pagando en casa por cárcel.
“Una vez se hicieron los contratos me volvió a buscar Olave para mirar cómo se iban a ejecutar esos recursos. Le sugerí que a través de brigadas de salud y la prestación directa en Quibdó. Me manifestó que todos esos recursos no se iban a utilizar para eso porque había que sacar un porcentaje para el pago de unas deudas que tenía el gobernador con el señor Carlos Murillo”, reza el testimonio revelado por Semana.com de los audios en que declaró Asprilla.
En otras de las declaraciones de Asprilla, este señala que el gobernador Palacio tenía pleno conocimiento que habían dineros existentes en la administración y destinados a la salud que él finalmente desvió para el pago de sus deudas en las que contaron con exsecretarios de la dependencia y otros asesores para cometer el ilícito. Entre ellos Carlos Murillo, un reconocido prestamista de la región y quien ofició como contralor departamental en años anteriores.
Respecto a las denuncias y la investigación que realiza la Fiscalía se dice que el desfalco podría superar los 12.000 millones de pesos.