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Desconocidos robaron nueve esculturas de los maestros Jorge Marín Vieco y de su tío Bernardo Vieco, que estaban expuestas en la casa museo Salsipuedes, del barrio La Pola, en la parte alta del sector de Robledo, en el noroccidente de Medellín.
Yuliana Marín, nieta del artista, dijo en declaraciones este sábado a EL COLOMBIANO que los hurtos se iniciaron el 11 de diciembre y el último lo realizaron el 25 de diciembre.
"Los delincuentes penetraron, al parecer, por la portada o saltando la cerca de la casa y despegaron las obras que estaban expuestas en los jardines y en el corredor principal, aseguradas con cadenas y candados que destruyeron con seguetas", denunció.
Las obras robadas, elaboradas en bronce, son: José Antonio Galán, Lavandera, Bohemia paisa, el logo del pintor de la empresa Pintuco, El Arriero y tres sapos de la fuente, así como un Cristo elaborado en yeso del escultor Bernardo Vieco.
Las directivas del museo le solicitaron a la ciudadanía y a las chatarrerías que no compren estas obras, si llegan a sus manos que las reporten a la Policía o si alguien ya las adquirió, que se abstenga de fundirlas, porque se trata de obras únicas de inmenso valor cultural para Medellín.
Contexto
El maestro Jorge Marín Vieco, escultor expresionista y músico, nació en Medellín en 1910 y murió en esta ciudad en 1976. Sus principales obras son: Amerindia, ubicada en el edificio de la Beneficencia de Antioquia; Juan del Corral, de Santa Fe de Antioquia, Hombre de Paz, conocido como el cristo del cementerio Campos de Paz; Jesús obrero, entre otras. También fue un destacado saxofonista que impulsó el jazz en Medellín.
Su casa en la parte alta de Robledo, que hoy en día un museo, fue adquirida en 1939 y se convirtió en sitio de encuentro de músicos, escritores y artistas de país y del exterior.
Entre sus ilustres visitantes se encontraban el premio Nobel de Literatura, el chileno Pablo Neruda; el escritor y periodista Gonzalo Arango; el filósofo y escritor, Fernando González; el poeta cartagenero, Jorge Artel, el pintor Horacio Longas, el muralista Pedro Nel Gómez, y el compositor y director de orquestas, el maestro Lucho Bermúdez, quien estuvo de visita en ese predio una semana y se quedó viviendo un año, por lo cual le compuso la canción Salsipuedes, considerada como un hito de la música tropical colombiana.