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En una entrevista concebida al diario El País de España, Rodrigo Tacla, quien trabajó como abogado en la construtora brasilera, reveló detalles de la manera en la que esa multinacional manejaba los sobornos para lograr contratos de obras públicas en diferentes países de Latinoamérica. Según Tacla, los sobornos no solo eran en efectivo, Odebrecht también enviaba prostitutas desde Brasil a diferentes países y hasta se encargaba “de la vida financiera de las esposas y exesposas de algunos políticos”.
Sobre Colombia, el abogado afirma que no conoce muy bien el proceso que se lleva en el país, pero afirma que aún no se dice toda la verdad, sobre todo de la cantidad de dinero que se habría utilizado para los sobornos. “No conozco a fondo el caso de Colombia, como tampoco tengo detalles de la situación en Argentina, Perú, Venezuela o Guatemala. Pero las cifras de Colombia reconocidas por la empresa son muy bajas. No creo que Odebrecht tuviera una estructura en el país por solo 43 millones de euros como se ha dicho”.
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Rodigo Tacla afirmó que en países como Brasil y Panamá, las cifras que se manejaban para el pago de sobornos eran millonarias, “la constructora lo arreglaba todo pagando, se que fueron más de mil funcionarios los salpicados con los sobornos. En comisiones ilegales, la empresa gastaba aproximadamente 260 millones de euros anuales”.
En la entrevista, Tacla revela que en Brasil, con el pago de 303 millones de euros para recibir contratos de obras por valor de 1.600 millones durante las presidencias de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff, “la cantidad fue mucho mayor. Allí se desembolsaban 130 millones de euros al año en comisiones. El dinero se entregaba en efectivo y por transferencias. Cobraba hasta el conserje. Los sobornos salpicaron a todos los partidos. De derecha, izquierda, de Gobierno, oposición”.
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A parte de todo, Odebrecht, también habría intentado regalarle un avión al expresidente de Panamá Ricardo Martinelli, sin embargo este rechazó esa oferta. Lo que si se aceptaba entre muchos funcionarios eran las fiestas con prostitutas, “la compañía enviaba mujeres desde Brasil a fiestas con políticos de República Dominicana y Panamá, era la forma de expresar agradecimiento por los tratos que se hacían, aunque eso también servía de chantaje, pues se tomaban muchas fotos allí y por eso se manejaba también información de las parejas de esas personas, la constructora arreglaba la vida financiera de las esposas de los políticos. Sobre todo de las exesposas”, agregó el abogado.