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China anuncia reforma que permite la entrada de capital privado en las empresas estatales
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FOTO AP
14 de septiembre de 2015
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China quiere mejorar la eficiencia de sus entidades estatales a través de un modelo que privilegie a las empresa privadas. Así lo está demostrando el gobierno asiático en las últimas semanas. Este lunes, por ejemplo, la Comisión Para la Supervisión de Activos Estatales (Sasac) anunció nuevas directrices para “reformar las empresas estatales” y convertirlas en “entidades de mercado independientes”.
“Crearemos las condiciones para que las empresas estatales participen en el mercado como jugadores independientes en igualdad de condiciones”, dijo en una rueda de prensa Zhang Xiwu, vicepresidente de la Sasac. Zhang leyó ante los medios de comunicación un esbozo del plan de la reforma, dividido en tres partes y con un total de ocho capítulos, elaborado por el Comité Central del Partido Comunista (PCCh) y el Consejo de Estado (Gobierno), sin aceptar preguntas de los periodistas.
En líneas generales, Zhang explicó que China modernizará a las empresas estatales promoviendo la propiedad mixta y permitiendo la inyección de capital privado. Esto, según el vicepresidente de la Sasac, permite que las empresas estatales “puedan ser independientes y responsables de sus beneficios, pérdidas y riesgos”.
El gobierno es consciente de que las entidades estatales, tal como funcionan, no son eficientes en la práctica. Por eso el documento apunta a transformarlas en compañías “creativas, que puedan hacer frente a rivales internacionales”.
El plan parte del intento de acelerar las reformas económicas ante la ralentización de la economía china, la cual afectará a 150.000 empresas estatales, que reportan un total de 100 billones de yuanes (15,69 billones de dólares) en activos y cuentan con 30 millones de trabajadores.
La idea es que las empresas estatales atraigan a nuevos inversores y que el Gobierno las apoye. Entretanto animará a las firmas no estatales a que participen en el proceso de varias formas, “incluyendo la compra de acciones y bonos convertibles, y también se permitirá a los empleados que compren acciones”, dijo Zhang.
Aunque no se ha revelado una fecha específica para la puesta en marcha de estas medidas, que se implementarán de forma gradual, el objetivo del Gobierno es tener resultados concretos para el 2020.
El plan subraya que se instaurará un sistema de estipulación de salarios “flexible” y basado en el mercado y en los resultados de la compañía. El proceso de reforma será supervisado de cerca para prevenir el abuso de poder y la erosión de activos estatales, y se establecerá un mecanismo para informar sobre posibles violaciones de normativas, corrupción y malversación.
Las entidades estatales, además, serán divididas en dos categorías: empresas de beneficios, con un enfoque de mercado, y empresas dedicadas al bienestar público.
Las compañías de petróleo, gas, electricidad, ferroviarias y telecomunicaciones fueron identificadas como sectores que pueden ser aptos para inversión no estatal ilimitada, con el objetivo de convertir a las empresas en “más fuertes, mejores y más grandes”, concluye la propuesta.
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