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Le precede la reputación de ser “el Papa del pueblo”, y qué mejor fecha para demostrar su vocación que el domingo 5 de julio, día en que inicia su gira por tres países de Suramérica: Ecuador, Bolivia y Paraguay.
Su idea de la “Iglesia para los pobres” se verá plasmada a lado y lado de los Andes, en su continente y en su tierra, con los ojos del mundo observando, por supuesto, a uno de sus personajes más influyentes llevando un mensaje de solidaridad con los marginados, con quienes el cristianismo entrega su mensaje fundamental de redención y amor.
En esta línea, son los pueblos indígenas los que ocupan el foco durante buena parte de la visita de Francisco, que se extenderá hasta el 13 de julio. Asimismo, los jesuitas del continente, que pertenecen a su orden, estarán cerca al Pontífice, resaltando su importancia en la evangelización del continente desde hace siglos y su mensaje de igualdad.
Así también lo ven expertos consultados por EL COLOMBIANO, que no dudaron en expresar la relevancia que tiene para el propio Pontífice visitar la tierra que moldeó gran parte de su ideario.
“Es claro que la gira por su tierra, la primera como uno de los personajes de mayor relevancia en el mundo, está cargada con mucho sentido. Llevará un mensaje de esperanza, sobre todo a los más pobres y descartados de la sociedad, todo en la vía de su oposición férrea a la cultura del descarte que prima hoy día en el mundo”, explicó José Manuel Vidal, director del portal Religión Digital y corresponsal en El Vaticano del diario El Mundo de España.
Monseñor Jorge Aníbal Rojas, director ejecutivo de la Fundación Solidaria de la UPB, coincidió con Vidal: “El Papa quiere amplificar su mensaje en países que se caracterizan por falta de equidad. Se trata de un grito de justicia social que instaurará en tierra suramericana. Por tanto, el Papa usará la gira como ejemplo para extender a otras latitudes”.
Pero además de sus prioridades frente a los pobres, el Pontífice prevé que su visita sirva para abordar otros asuntos. El más importante de estos será el medio ambiente, con el Amazonas, las selvas y demás entornos naturales del continente como una necesaria preocupación. Así lo ve Vidal:
“Su encíclica sobre el tema, bastante comentada en el mundo, es algo que ratificará en su gira. Máxime si Suramérica sufre como ninguna los efectos que tiene sobre el medio ambiente un sistema mundial del derroche y del descarte, asuntos ante los que el Papa ha reiterado su oposición”.