El sector de las confecciones lleva meses anunciando una crisis económica y pidiendo reestructuración en las políticas comerciales que lo rigen. En lo corrido de octubre ya han realizado dos marchas pacíficas en el país.
Jorge Duque, directivo de la Cámara Colombiana de la Confección y Afines y empresario textil, habló con Colprensa sobre la situación que atraviesa el gremio y de las consecuencias a las que se podrían enfrentar si no se toman medidas que respondan a las necesidades actuales de los textileros.
El sector textilero viene lanzando alarmas ¿la situación está tan grave?
“Muy grave. Por eso estamos tomando todas las medidas necesarias, de ahí la marcha del jueves. Pero sí, la situación ya no da más espera. El sector textil en el país viene perdiendo empleo y competitividad, estamos lentos. El Dane dice que hemos perdido 11 puntos de la economía y ese retroceso hace que se anulen puestos de trabajo y que se afecte la microeconomía, porque esos salarios que se dejan de ganar son los que revitalizan los sectores económicos”.
Usted habla de pérdida de empleo pero, en cifras, ¿cuánto ha perdido el sector en lo que va del 2017?
“Mucho. Calculamos que la cifra podría estar en cerca de 200 mil empleos perdidos este año y que al finalizar el 2017 se cierre en 250 mil personas del sector sin trabajo”.
¿Cuál es el grueso de la población textilera que se ve más afectada?
“Los trabajadores informales, entendiendo la informalidad no sólo como los comerciantes que vemos en las calles, sino como aquellos microempresarios que tienen menos de 11 empleados”.
¿Socialmente quiénes son los más golpeados en el sector?
“Las madres cabeza de hogar. Son ellas las que trabajan a destajo para mantener a sus familias en nuestras fábricas. No tienen viviendas dignas y en mucha ocasiones ni siquiera los servicios básicos. Otra cosa terrible y que hemos estudiado es que de estas madres cabeza de familia, el 50% son víctimas del conflicto armado colombiano y al no tener empleo seguro, las estamos revictimizando”.
¿Qué aspectos llevaron hasta este punto al sector?
“Cuatro puntos básicos. Las malas políticas fiscales y aduaneras; los recargos tributarios del Estado; el contrabando abierto y técnico, y la masiva importación de países asiáticos”.
¿Qué piensa hacer el gremio?
“Estamos solicitando intervención de instancias judiciales y seguiremos convocando a la opinión pública hasta que logremos ser escuchados. Vamos a presentar leyes al congreso porque el Gobierno debe escucharnos cuando hablamos de bajar el IVA al 5%; de los créditos blandos y de beneficios que actualmente tienen otros sectores como el hotelero”.
¿Cuánto tiempo le queda al sector para llegar a su máxima crisis?
“Ya estamos en crisis máxima. Le pongo seis meses para que desaparezca el sector”.