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A esta reforma tributaria hay que calibrarle cosas: Bojanini
El presidente de Grupo Sura cree que 2017 será mejor para la economía, pero insta a debatir temas claves como la reforma pensional y mayor seguridad jurídica.
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El presidente del Grupo Sura, David Bojanini García, cree que el Gobierno tiene que asumir el reto de presentar pronto una reforma pensional, sin dilatar más ajustes al sistema previsional. FOTOS Jaime Pérez
05 de diciembre de 2016
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Grupo Sura es un termómetro de la salud del empresariado colombiano, y lo es porque la multilatina tiene negocios en sectores claves de la economía local. El diagnóstico que haga su presidente David Bojanini es un insumo relevante para entender los retos del país y hacia dónde apunta la inversión
En diálogo con EL COLOMBIANO, el empresario dio pistas de qué sigue para el conglomerado, sus apuestas en vías 4G y su visión del sistema de salud.
Bojanini repasó efectos económicos de la elección de Donald Trump, sentó postura ante nuevo acuerdo con las Farc, advirtió de líos del sistema pensional y cree que a la reforma tributaria “hay que calibrarle cosas”.
Visto bueno a nuevo acuerdo, Trump y a economía
¿Cuál es el gran balance de este año para Grupo Sura?
“A pesar de la volatilidad, creemos que todas las empresas terminarán con crecimiento operativo y eso va a ser satisfactorio. El año estuvo marcado por momentos difíciles, como es el caso de la victoria del No en el plebiscito, así como la incertidumbre que generó el brexit (separación del Reino Unido de la Unión Europea) y, recientemente, la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos. Pero este año pasará según lo presupuestado”.
¿Cuál es su análisis sobre este nuevo acuerdo con las Farc?
“El hecho de que en el plebiscito hubiera ganado el No daba la posibilidad de reformar cosas que no estaban tan bien. La manera como el Gobierno manejó la situación fue correcta. Buscar el acuerdo perfecto es imposible, pero es verdad que el tiempo jugaba en contra de este nuevo acuerdo”.
¿Cuál es su mensaje a los del No?
“Los respeto mucho y jugaron un papel muy importante en el plebiscito. Pero prefiero tener este nuevo acuerdo a no tener nada”.
¿Cómo ve el proceso de implementación de los acuerdos?
“Las preocupaciones van en esa vía, los acuerdos deben implementarse bien, con diligencia y deben permitir que el sector privado participe, levante la mano y dé su opinión. Así puede ser menos traumático para el país”.
¿Cómo quedan las fichas para la negociación con el Eln?
“No estoy de acuerdo con que sea muy diferente a lo hecho con las Farc, pues tendríamos un mundo de acuerdos diferentes por implementar. La tarea está en homologar lo más posible”.
De otro lado, ¿cómo analiza la victoria de Trump?
“No soy tan alarmista como mucha gente. Los mercados han sobrerreaccionado, como lo hicieron con otros en el año. Creo que mucho de lo que se prometió en campaña se moderará con el paso del tiempo. El Partido Republicano cuidará mucho esta oportunidad en la Casa Blanca”.
Pero, ¿afectará esto a la economía latinoamericana y, en especial, a la colombiana?
“Seguramente Trump tendrá una forma particular de gobernar, pero tendrá un partido rodeándolo y creo que eso hará que la economía no se afecte. En Colombia creo que no debemos preocuparnos tanto, como sí deben hacerlo en México, por ejemplo. Pero incluso en ese país ya hay mensajes de calma”.
Este año estuvo cargado por la volatilidad internacional, pero qué factores internos jugaron una mala pasada a la economía
“Tuvimos un año duro de maniobrar. Lo fue porque se juntaron los factores claves, como que la inflación fue muy alta, el paro camionero (45 días), que no lo podemos olvidar, le dio un golpe fuerte a la economía y la devaluación también dejó sus efectos. En todo caso, el nuevo acuerdo con las Farc es bueno, luego de un plebiscito que polarizó y esto afecto el ambiente de los negocios”.
El lío con las pensiones y el sistema de salud
Un caso de estudio en el país es la EPS Sura, de las pocas que da ganancias, ¿cuál es el secreto?
“Gana poquito, apenas sobrepasa el punto de equilibrio y da resultados porque se ha reinventado muchas veces”.
¿De qué manera?
“Se demuestra que al administrar bien se puede tener un negocio sostenible. Tiene que ver con procesos de contratación, porque todos los que participamos en la cadena de la salud tenemos que pensar que tenemos un rol. Si alguno trata de cobrar más dinero, desequilibra todo y todos perdemos. Es ahí donde tenemos que trabajar todos los días”.
Entonces, ¿qué tiene sumido en crisis al sistema?
“El germen es la mala administración, que no tiene controles y genera contratación inadecuada”.
Uno de los tumores del sistema y que afecta negocios de Grupo Sura es el mal uso del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (Soat), ¿cómo sanear este tema?
“Hay que ponerle controles. Veo un problema de corrupción y hay que atacarlo con todo el peso de la ley, porque es un robo al sistema”.
Siguiendo con temas espinosos, ¿qué falta para debatir la reforma pensional?
“Los problemas ya están sobrediagnosticados. Es una lástima, pero la reforma pensional está asociada a costos fiscales, y con un déficit como el que tenemos, el ambiente para discutirla es muy difícil. Sin embargo, esto no quiere decir que no sea urgente”.
¿Cuál es su diagnóstico?
“El problema es la baja cobertura, porque mucha gente no va a tener pensiones, por la exigencia tan alta en semanas de cotización. Hay que hacer una reforma y se puede hacer de manera que no sea fiscalmente tan onerosa, pero que aumente la cobertura”.
¿Qué enferma al sistema?
“El mayor daño es esa campaña indiscriminada para mover gente de los fondos privados de pensiones a Colpensiones. Es grave que se promueva que la gente se pase de un lado al otro para bajar déficit al Gobierno. A la larga, cada persona que se pasa genera un costo para el país. Creo que el régimen público de Prima Media y el privado de Ahorro Individual deberían fusionarse en uno solo colaborativo”.
Pero esa probabilidad no se ve en el corto plazo...
“Ni los ministros de Hacienda ni los presidentes de Colpensiones estarán en esos puestos cuando se tenga tan alta la deuda. Las responsabilidades en el largo plazo no las asumen quienes crearon el problema. Hoy la prioridad es tapar el hueco fiscal y es difícil ver soluciones para retos a largo plazo para gobiernos de cuatro años”.
La tributaria y sus ajustes
En términos generales, ¿cómo le parece la reforma tributaria que presentó el Gobierno?
“En general, buena, fue el mejor acercamiento a una estructural. Es normal que pise muchos callos, porque nuestras últimas reformas dejaron un sistema lleno de exenciones. El objetivo es dejar de tener un Estatuto Tributario que parezca una colcha de retazos”.
A su juicio, ¿qué más debe propender esta reforma?
“Primordialmente redistribuir el ingreso de manera eficiente y equitativa. No puede seguir pasando que se cobren más impuestos y la plata se vaya en subsidios mal dirigidos. Ahí se perdería todo el impulso. Ahora, hay que darle un estímulo a la inversión vía impuestos corporativos y ampliar la base de contribuyentes, porque las reformas anteriores recaen sobre los mismos y las empresas ya están agobiadas, pagando 50 % de sus utilidades en impuestos”.
Pero, ¿todos los reclamos que se le hacen a la reforma son injustificados?
“Cuando sale un proyecto como estos, todo el mundo salta a buscar su beneficio. La invitación es a que todos miremos la reforma de manera completa, sí es buena para el país, es buena para todos. Claro, hay detalles que se tienen que modificar, cosas que se pueden calibrar”.
¿Habría que hacer ajustes en la propuesta de impuestos corporativos?
“La inquietud sobre la tarifa que resultaría al sumar el impuesto de renta y los dividendos podría ser válida, aunque al parecer seguiría siendo inferior a la actual. Podría hacerse en todo caso un pequeño ajuste, sobre todo al impuesto al dividendo que podría bajarse de donde pretende hoy el proyecto, sobre todo, porque hay que tener cuidado con los mercados de capitales. En particular nuestro mercado bursátil es de tamaño reducido, y esto podría desincentivar la inversión en acciones”.
En el caso de aumentar el IVA...
“Hay que hacerlo porque es la única fuente de ingresos tributarios a corto plazo. Todo hay que hacerlo con mucha mesura y bien para que cumpla objetivos, pero que no se vaya a desincentivar la inversión en Colombia”.
¿Es una reforma que dará estabilidad a largo plazo?
“Si se hace bien, esperamos que pueda ser de más largo aliento”.
Proyectos en la mira de Grupo Sura
Las cuentas del Grupo hasta tercer trimestre van muy bien. ¿Cuáles serán los puntos estratégicos en 2017 para consolidar esos números negros?
“En cuanto al negocio de seguros tendremos que consolidar la operación de RSA, que ya se integró este año. En 2017 ya se reflejará en los resultados financieros. Estaremos muy atentos a la administración de activos de Sura Asset Management, en los que buscaremos mayores eficiencias para mejorar indicadores y hacerla más competitiva. En todos los negocios tenemos un horizonte claro para 2017: invertir en innovación y soluciones digitales”.
Entonces, ¿cuál es la estrategia con los productos de Sura AM?
“Mantener un portafolio muy amplio con los fondos que administra la compañía o por terceros. La idea es atraer mucho ahorro que nos permita crecer”.
Tras la consolidación del negocio con RSA, ¿hay alguna compra o algún país en el radar de Grupo Sura?
“Creo que ya estamos en los países donde debemos estar. Ahora tenemos retos grandes y suficientes para próximos años. El camino es el de fortalecer operaciones en todos los territorios donde hacemos presencia”.
¿En cuáles países hay matores retos?
“A los que recién estamos entrando, como Brasil y Argentina, donde hay que posicionar una marca, darnos a conocer. Mientras en Chile, por ejemplo, ya saben quiénes somos. La experiencia en esas naciones nos ha ayudado mucho. Incluso, un objetivo ambicioso es consolidarnos en México que, por su tamaño, es una misión muy compleja, pero en la que tenemos puesta mucha esperanza”.
De otro lado, ¿cómo participa el Grupo Sura en las vías 4G?
“Participamos desde todos los frentes, el banco (Bancolombia) con sus créditos ya ha hecho desembolsos. Ya tenemos el fondo de infraestructura entre Sura AM y Credicorp. Además estamos en el programa de aseguramiento de los proyectos. Vamos midiendo el riesgo y eligiendo dónde queremos estar, pero siempre motivados en participar”.
Sobre el fondo de Sura AM y Credicorp, ¿hay posibilidades de lanzar un segundo fondo?
“Sí, la posibilidad existe. Creo que lo habrá, pues hay proyectos que ya tienen cierre financiero, pero hay otros que aún necesitan financiación. Todo dependerá del nivel de riesgo y que las condiciones sean las adecuadas”.
¿Cuáles son los riesgos que está analizando con mayor rigor el grupo?
“En materia de infraestructura hay muchas cosas que juegan, una de las principales es si el constructor y el concesionario tiene la solvencia que se necesita para prestarle. Ahora bien, creo que también hay que mandar el mensaje al Gobierno para que se comprometa aún más en la negociación con comunidades y la aprobación de las licencias ambientales”.
Es decir, que los problemas de seguridad jurídica siguen y no dejan avanzar la financiación...
“No es un tema completamente resuelto y esto tiende a generar situaciones que aumentan los costos, generan demoras y pueden afectar la viabilidad de un proyecto”.
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