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Durante el primer trimestre de este año el sistema financiero percibió una disminución en la demanda de los créditos, principalmente, en las modalidades comercial y de consumo.
Así lo evidenció “la Encuesta trimestral sobre la situación del crédito en Colombia”, elaborada por el Banco de la República, según la cual los establecimientos de crédito que respondieron el sondeo (bancos, compañías de financiamiento y cooperativas financieras) observaron el fenómeno, que fue más pronunciado en los bancos.
Con respecto al acceso a nuevos créditos, diferenciando por sector económico, los bancos y las compañías de financiamiento indicaron que la industria es el segmento que tiene mayores facilidades seguido de los sectores de comercio y servicios.
Por su parte, las cooperativas consideraron que a la hora de otorgar un crédito nuevo prefieren a las personas naturales y luego a la industria.
A su turno, las actividades asociadas a la importación y a temas agropecuarios son los que perciben mayores dificultades para acceder al crédito, según las entidades del sistema financiero.
Con respecto a los factores que impiden otorgar un mayor volumen de crédito al sector privado, los intermediarios financieros continúan señalando que la capacidad de pago del solicitante es el principal obstáculo.
Otro hallazgo del estudio tiene que ver con los cambios en las políticas de asignación de nuevos créditos.
En este frente, las 29 entidades que participaron mencionaron que el conocimiento previo del cliente y su buen historial crediticio son los principales aspectos a tener en cuenta para el desembolso del empréstito. El segundo criterio que determina la aprobación de nuevos créditos es su flujo de caja proyectado.
Igualmente, aquellas entidades que incrementaron los requerimientos para otorgar un préstamo señalaron como causa principal una perspectiva económica menos favorable o incierta y el deterioro en sus posiciones de balance.