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La disolución y liquidación de Fogansa (antes Fondo Ganadero de Antioquia) aprobada el viernes en asamblea extraordinaria por la mayoría de accionistas, le cerró las puertas a la proyección que tenía la empresa de ser una de las más importantes productoras de alimentos del país, enfocada en la proteína animal, la fruticultura y la producción maderera.
“Los negocios de la compañía estuvieron suspendidos durante más de un año, esperando los resultados de la oferta pública hecha por el accionista principal, Instituto para el Desarrollo de Antioquia (Idea), llegando a tener una composición del patrimonio que la hace inviable”, explicó Alonso Sanín Fonnegra, presidente de Fogansa.
El empresario añadió que en la situación actual, vender los activos para comprar ganado es imposible, porque los avalúos elaborados por el Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo (Fonade), sobre los predios que posee la firma, son imposibles de obtener en el mercado. “No teniendo ganado, estamos en un negocio inmobiliario y por eso es mejor optar por una disolución”.
Mauricio Pérez, gerente del Idea, institución que posee el 33,61 por ciento de Fogansa, explicó que desde el año 2010 se intenta adelantar una desinversión, toda vez que no se trata de una actividad estratégica y, además, no es rentable.
El funcionario reveló que desde hace algún tiempo los órganos de control le han advertido al Idea de un posible detrimento patrimonial por mantener esa inversión.
Estimó que los recursos de la entidad oficial en esa empresa alcanzan los 45.000 millones de pesos y confió en que en el proceso de liquidación se puedan recuperar.
En la reunión, accionistas minoritarios como Luis Fernando Duque, lamentaron que luego de 20 años de estar esperanzados en sacar a flote la empresa, el intento hubiera fracasado.
Los representantes del Ministerio de Agricultura (dueño del 4,78 por ciento) propusieron acoger la liquidación judicial por considerarla más expedita para adelantar el trámite, pero su iniciativa no fue acogida.
Para José Félix Lafaurie Rivera, presidente Ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), lo ocurrido con Fogansa prueba que desde hace diez o quince años el Gobierno le está metiendo la mano a los fondos y estos quedaron en el peor de los mundos.
“Los fondos tienen todo lo que exige lo público, sin ninguna de las ventajas de los privados. El Gobierno terminó sin política y por eso Fogansa está en el camino de acabar con esa mixtura y volverse un fondo privado”, manifestó el dirigente.
Añadió que tras esta liquidación, los fondos ganaderos que se mantienen en el país, quedan muy maltrechos.