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Con este mecanismo que sería presentado en los próximos días, se pretende estabilizar los actuales precios al productor y también evitar alzas que afecten a los consumidores.
Aunque Fedearroz, el gremio arrocero nacional, reconoce que el dólar está impactando los costos de producción de los cultivadores, espera que este factor no propicie nuevas alzas para el consumidor final.
En ese sentido, el Gobierno Nacional, los arroceros y la misma industria molinera tomaron cartas en el asunto, y durante el Consejo Nacional del Arroz, se acordó la activación de una nueva franja de precios.
Una fuente del sector le dijo al diario El Nuevo Día, que la franja tiene un valor ‘piso’ (mínimo) y otro de ‘techo’ (máximo), que tiene como propósito estabilizar los precios al productor y al consumidor.
Con la franja, cuando el valor de la carga se acerque al precio ‘techo’, esto indicará que existe un desabastecimiento de cereal en el país, lo cual le servirá al Consejo Nacional del Arroz para evaluar la posibilidad de autorizar la importación del cereal.
Si por el contrario, el valor de la carga se ubica en el precio ‘piso’, esto indicará que existe un abastecimiento normal de arroz en el mercado nacional.
“Se espera que esa franja sea como un blindaje para que tanto el precio del productor como el precio al consumidor no se vea afectado”, explicó la fuente.
Los precios ‘techo’ de la carga de arroz para Espinal e Ibagué en Tolima, quedaron en 153.000 y 154.000 pesos, respectivamente.