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Sorprendidos con las voluminosas cifras logradas por el Grupo Argos en 2016, se declararon la mayoría de accionistas de la holding que participaron en la reunión anual, celebrada ayer en Plaza Mayor.
La presencia en 18 países de este grupo de infraestructura, a través de diferentes filiales que en su conjunto emplean a 11.419 personas, le permitió facturar 14,6 billones de pesos y consolidar activos por 45 billones de pesos.
El presidente de la compañía, Jorge Mario Velásquez, en su mensaje a los accionistas manifestó que en lo político, el 2016 fue un año de profundos cambios, marcado principalmente por la incertidumbre en diversas geografías y un entorno volátil, que en algunas circunstancias desconcertaba el devenir de los mercados y la dinámica de los negocios (ver Paréntesis).
“En Colombia los vaivenes del proceso de paz y la reforma tributaria motivaron actuaciones cautas del público inversionista”, agregó.
Para los analistas económicos, los resultados financieros de la compañía fueron positivos, gracias a la consolidación de Odinsa (filial de concesiones) y la recuperación de Celsia (filial de energía) tuvieron un impacto favorable sobre las cifras.
Los expertos de la firma Casa de Bolsa insistieron en que las adquisiciones de Odinsa y Opain (concesionario del aeropuerto Eldorado), demostró la intención del Grupo Argos de convertirse en una compañía líder en el sector de infraestructura en Colombia, consolidando su presencia en las concesiones viales y aeroportuarias.
En el escenario de corto plazo, Velásquez recordó que el plan de inversión que están ejecutando sus diferentes filiales (2016-2018) contempla inversiones por 2.500 millones de dólares.
De ese paquete hacen parte las inversiones que Odinsa comprometió en la concesión vial Pacífico 2, por 400 millones de dólares y el plan de expansión que Opain ejecuta en el aeropuerto Eldorado de Bogotá (400.000 millones de pesos).
Pese a que su filial Cementos Argos tiene varias plantas cementeras y concreteras en Estados Unidos, Velásquez descartó que estas puedan actuar como proveedoras de material para el pretendido muro que el presidente Donald Trump, planea construir en la frontera con México.