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Las disputas entre los operadores de telecomunicaciones van más allá de minutos, datos, planes, cobertura y señal por cable de televisión. Ahora, posicionarse como proveedor de contenidos para el consumo de videos y programas para ver en tiempo real a través de cualquier dispositivo, es el nuevo campo de batalla.
Movistar lo tiene claro y ya está dando sus primeros golpes con la firma del contrato para tener los derechos exclusivos y trasmitir desde la próxima temporada los partidos del Fútbol Club Barcelona, donde están Messi, Neymar y Suárez, entre otros; y también renovó su patrocinio con la Federación Colombiana de Fútbol por cuatro años, pensando más en la Copa América de junio en Chile y las eliminatorias a Rusia 2018.
“La apuesta grande es televisión, pero más que todo es video. Somos conscientes que el video marca la diferencia en el negocio de telecomunicaciones. Televisión es enmarcarse en el televisor tradicional y ahora la gente quiere ver video en cualquier dispositivo tecnológico, a la hora que quiera y donde sea. Ahí es donde hemos venido trabajando arduamente”, señaló Juan Fernando Molina, gerente regional de Movistar.
La intención global de la compañía española regada por toda Latinoamérica es convertirse en el primer operador de video de habla hispana. Hoy cuenta con más de 600 millones de accesos.
Para lograr ese objetivo, los contenidos importan pero más aún la tecnología para que los usuarios no se queden esperando cada 30 segundos a que la señal del video cargue y rezar para que no se hayan perdido la jugada del gol de su equipo de fútbol o el final de la temporada de su serie favorita.