Por Nora E. Pérez
En sectores como la paralela a la quebrada La Ayurá, la administración de Envigado habilitó ciclorrutas que pretenden proteger el alto número de practicantes que tiene el ciclismo en este municipio.
La iniciativa está bien intencionada, pero aún no bien terminada, pues en algunos sitios del estrecho recorrido los ciclistas encontramos verdaderas trampas en las rejas de las alcantarillas. Son huecos inmensos que cortan el paso y provocan caídas si el ciclista no alcanza a esquivarlos. Alcalde Alcalde, si se invirtió en la ciclorruta, ¿por qué no se gasta lo que falta para que las rejillas tomen el nivel del pavimento y dejen de ser un peligro para los deportistas?...