Por LINDSEY FORD Y WENDY S. CUTLER
El arresto de Meng Wanzhou, un alto ejecutivo de una de las compañías de mayor importancia estratégica de China, el mismo día en que el presidente Donald Trump y el presidente de China, Xi Jinping, declararon una “tregua” de 90 días en su guerra comercial, es una movida diplomática inesperada que podría cumplir algunos objetivos de seguridad nacional, pero podría complicar las próximas negociaciones comerciales con Beijing.
La administración va a enfrentar muchos más momentos difíciles como este a medida que aumenta su competencia con China, pero sus acciones hasta ahora sugieren que no tienen un plan completamente formado en cuanto a cómo manejar la tarea.
Aunque parece que el momento del arresto de Meng fue...