En medio de todas las dificultades que tenemos en un país en desarrollo como el nuestro, la buena noticia es que la posibilidad real de terminar el conflicto armado cada vez se hace más real.
Claro, a los críticos siempre les parecerá que las cosas no van bien, que todo es un montaje y demás expresiones y seguirán predicando, seguramente con una audiencia más precaria, que se trata de priorizar la venganza que la búsqueda de la paz; pero esas voces es legítimo que se sigan escuchando, porque eso es lo propio de la democracia, respetar las opiniones distintas, aunque algunos cuando tienen algún poder, justamente no lo hagan.
La Mesa de Conversaciones, que tiene dos buenos equipos de negociadores y eso es fundamental en un proceso tan complejo...