El Gobierno tiene la oportunidad de oro para acabar la polarización generada por el acuerdo con la guerrilla y, con un frente único, renegociar con las Farc. Pero todo indica que ha optado por lo contrario.
Las últimas declaraciones de Santos y de De la Calle señalan que no quieren hacer los cambios que necesita el acuerdo para conseguir el apoyo de quienes votaron por el No. Por un lado, insisten en que los cambios deben hacerse de manera apresurada (“quiero terminar esto pronto, muy pronto”) y, por el otro, después de defender el acuerdo alcanzado, recalcan que lo que debe hacerse son solo “ajustes y precisiones” (“estamos convencidos de las bondades del Acuerdo Final”). Santos agregó que algunas propuestas del No “son totalmente inviables”....