En una de las secciones más importantes de este periódico, “Un día como hoy”, se recordaban hace poco los consejos aparecidos hace 100 años para aquellas que buscaban novio o estaban casadas.
Para las solteras esto era lo sugerido: “El novio que puede llegar a ser marido, debe tener por lo menos seis años más que la novia. Nunca te le presentes sin peinar, mal calzada o vestida con desaliño. Casi todas las muchachas aceptan un novio para hablar, aunque no les guste el sujeto. No lo hagas. Habla con tus amigas, tú sola o no hables”.
Para quienes ya habían capturado alguno y sus esfuerzos debían concentrarse en conservar su condición de esposas, estas eran las recomendaciones: “Procure que la luna de miel no se azucare demasiado; así la prolongarás...