Lo dice una adicta, que no esclava: Internet nos ha facilitado la vida, pero... hay que cogerla con pinzas y abrirla con destornilladores de precisión, so pena de terminar esquilmados, estafados y adoloridos, entre muchos otros posibles estados.
El periodista Jonathan Montoya García, en este periódico, nos ha presentado en las últimas semanas dos informes muy interesantes al respecto. En ambos, los titulares lo dicen todo: “Los algoritmos lo conocen más que su mamá”, y “Que no le vendan humo en internet”.
Un algoritmo es un conjunto de reglas definidas, ordenadas y finitas, en cristiano se llaman huellas, que vamos dejando en cada entrada a internet, donde ojos que no vemos ni sospechamos, nos vigilan con lupa, nos siguen, nos persiguen y, si...