Viendo llegar los guerrilleros a las zonas de agrupamiento y continuando en el ejercicio de entender a las personas que sin agendas ocultas y a partir de un convencimiento sincero estuvieron en contra de los acuerdos y con el objetivo de disminuir el nivel de crispación constante y división profunda a la que nos tienen sometidos los líderes de uno y otro lado y sus huestes fanáticas que se insultan, agreden y mienten sin clemencia y ante la ineludible necesidad de reconciliarnos para poder construir un país diferente, quiero reflexionar sobre los “inamovibles” de los que se oponen y su significado en una visión social de largo plazo.
Para mi esos “inamovibles” son dos fundamentalmente: la impunidad y la elegibilidad política. Dejemos por fuera...