Hoy el planeta amanece preguntándose por qué a uno de los mejores jugadores de la historia no lo acompaña la fortuna de los goles y las victorias en los campeonatos mundiales de fútbol. Lionel Messi agranda su álbum de fotografías de desconsuelo: falla un penalti contra un arquero islandés con seis años de profesional, que es, incluso, mejor como director de cine, Hannes Halldórsson.
“Messi, querido, ché, por qué se te ve tan desangelado en las copas del mundo”, se preguntan los argentinos y la otra mitad más uno de los fanáticos de este deporte, que siguen sus hazañas en el Barcelona, donde cabalga y conquista toda corona que dejan a su paso. Pero, en el Mundial, se convierte en una pulga.
En la marejada de especiales que inunda la TV por estos...