Preocupante el informe de la revista Semana sobre el plan de refundar las Farc. Una publicación dirigida por el sobrino del presidente Santos. Señala que los disidentes de esa organización podrían sumar hoy 4.000 hombres, presentes en 18 departamentos. Y que como van la cosas, el año entrante alcanzarían la cifra de 8.000 combatientes. Todo esto conformaría un expediente como para que Juan Manuel Santos devolviera, por simple vergüenza internacional, el premio Nobel de la Paz.
Fuera de tan estremecedora herencia del rebrote subversivo, va a recibir Iván Duque una nación en donde el posconflicto se ha ido caracterizando no por modelar la paz, sino por acentuar la violencia patentizada en la muerte de líderes sociales. Tendrá bajo su responsabilidad...