Por primera vez en 105 años de historia municipal, un presidente en ejercicio visitará este jueves 18 a Montebello (coordenadas en el título de la columna), el pueblo donde pegué mi primer berrido en protesta por haber dejado el hotel mamá.
Con la presencia del presidente Iván Duque, 7.864 montebellenses, incluidos los 3.017 que votaron en la segunda vuelta, están güetes, no se cambian ni por Dios mano a mano.
Por la salud, tranquilo: su anfitrión el alcalde conservador Ferdinando Muñoz es médico destacado. Duque se ahorraría el vale de la prepagada. Pero seguramente no habrá necesidad de que el alcalde lo atienda de ningún achaque.
Tan pronto el forastero pisa el empinado pueblo construido contra la expresa voluntad de Dios, como Manizales, se...