Decía Demócrates que “todo está perdido cuando los malos sirven de ejemplo y los buenos de burla”. Bien podría significar esta frase mucho de lo que nos está pasando hoy en Colombia.
Hace unos días recibíamos la noticia de la “libertad” del general Jaime Humberto Uscátegui. Aunque causa gran alegría saber que el general hoy abraza de nuevo a su familia y para siempre desde su hogar y no detrás de las rejas, queda una sensación de incertidumbre al saber que el proceso aún continuará por un camino largo, tortuoso y lleno de injusticias, si tenemos en cuenta que hay ya 12 condenados por fraude procesal y falso testimonio que fueron argumento para la condena.
Cuando hacíamos un análisis juicioso de lo contenido en los textos negociados con las Farc...