Por Luis Carlos Montoya Mejía
El pasado miércoles 31 de octubre me dirigía a mi casa en Sabaneta con mi familia, después de celebrar con mis nietecitos el día de las brujitas, y en un recorrido normal de 20 o 30 minutos, nos demoramos tres horas, todo porque unos delincuentes enmascarados, en motos y muchos de ellos con arma en mano, se apoderaron del noroccidente de la ciudad, se pasaban todos los semáforos, hacían la U en la misma vía haciendo grandes recorridos en contra vía y poniendo en peligro sus vidas y las de los que íbamos en nuestros vehículos.
A todos los conductores les daba físico miedo pasar, para evitar algún accidente, y lo más triste de toda esta historia, es que no se veía ni un solo policía y mucho menos ningún agente de tránsito....