Hace unas semanas tuve la oportunidad de ir a Quibdó para asistir al cierre de un proceso de intervención social en un complejo habitacional de 1.500 soluciones de viviendas entregadas a familias de escasos recursos dentro del programa de gratuidad que tiene el gobierno nacional.
Los que han estado cerca de procesos de reasentamiento de familias de escasos recursos saben de la complejidad que tiene lograr niveles de convivencia adecuados a esos espacios donde llegan. Es un factor crítico para la sostenibilidad de los proyectos. Lo que empieza como un mejoramiento de los niveles de vida de las familias beneficiadas se puede convertir rápidamente en un problema social de dimensiones insospechadas.
La Fundación Orbis se lanzó a la tarea de contribuir...