Es deplorable que este gobierno, que ya agoniza en su periodo, no hubiera aprovechado las mayorías del Congreso para hacer las reformas económicas y sociales más apremiantes. Las utilizó para aplastar las iniciativas de las fuerzas opositoras que intentaron devolverle parte de la dignidad al Estado, perdida en el acuerdo habanero. Y así dejó pasar el tiempo para darle otra oportunidad de desarrollo a la Nación. Ahora tantas represas serán el mayor desafío para el próximo cuatrienio.
La reforma pensional es inaplazable. Constituye una bomba de tiempo. Su deuda se calcula en 900 billones de pesos, un monto igual al del PIB. Hoy el 70 % de los colombianos “no tienen posibilidad de disfrutar una pensión que les garantice los mínimos necesarios al...