O I Zuluaga ha puesto en espera su precandidatura. Mantenerse en la carrera le hacía daño al Centro Democrático. El suyo es un gesto generoso y responsable que merece ser aplaudido.
Su salida deja abierto el panorama de las candidaturas. Han aflorado alternativas que enriquecen mucho el abanico. Sin embargo, no es el momento de concentrarse en el nombre del candidato. Primero, porque es prematuro y riesgoso. Santos impulsó una judicialización muy peligrosa de la política, donde se instrumentaliza al sistema judicial para atacar a los contradictores.
Después, porque hay tres tareas que son más urgentes e importantes en este momento y la discusión de las candidaturas nos distrae. Una, construir y solidificar la gran alianza que permita ganar la...