La muerte del escritor Henning Mankell me sorprendió terminando de leer sus memorias. A principios del año pasado el escritor sueco, famoso por crear al detective Kurt Wallander, anunció que tenía un tumor cancerígeno en el pulmón izquierdo que le había hecho metástasis en el cuello; desde entonces, decidió enfrentar su enfermedad como debe hacerlo un escritor: escribiendo. El resultado: “Arenas movedizas”, un libro que leído bajo el tamiz de su reciente muerte, resulta particularmente duro. ¿Por qué? porque en estas memorias está la esencia de un hombre que quería que la muerte le diera un poco más de vida. Pero así es la muerte, caprichosa.
Curiosamente, mientras Mankell enfrenta su cáncer a través de largas sesiones de quimioterapia, sus recuerdos...