Querido Gabriel,
Te propongo que hablemos de bibliotecas. Un buen libro transforma una vida. Incluso creo que uno malo puede lograr el mismo efecto, si motiva un segundo, o un tercero. Ninguno es irrelevante, ni siquiera los de superación personal, como nos decía Huguette, de las mediatecas de la región de Toulouse. Recomendar un libro plantea una profunda responsabilidad ética y vital. Nunca se sabe qué puede pasar después. ¡De pronto, luego de un cómic viene El Amor en los Tiempos del Cólera!
Te invito a que celebremos en tu tertulia que Medellín es líder en lectura, según una encuesta nacional. Años de trabajo de sectores público y privado, fiestas del libro, y libreros que resisten a los retos del mercado, están dando frutos. ¿Qué tal si preguntas...