Seguramente que la expresión “lorem ipsum” del título deja al lector viendo un chispero. El mismo que vio el sábado 11 de noviembre, cuando en la portada de este periódico, entrando a la izquierda, en la caja reservada para un anticipo y antojo del editorial, sus ojos asombrados leyeron lo siguiente: “Nunc fringilla malesuada tellus nec vestibulum. Aliquam incidunt hendrenit porta, etc. etc.” Que suena como a latín, y en el latín está inspirado, pero es un texto incoherente utilizado en diseño gráfico para reservar un espacio que antes de la impresión debe ser reemplazado por el texto definitivo.
Se disculpó, por supuesto, El Colombiano al día siguiente (pag. 18), por un error que califica de inadmisible, pues en vez de publicar el párrafo destacado...