Pasó con alias “Inglaterra” la semana pasada. También con Pablo Escobar hace 24 años y con Efraín González hace 52. Son algunos de los bandoleros “buenos”, admirados por la otra Colombia.
En esa otra Colombia viven los que nacieron en un contexto de pocas o cero oportunidades, por ausencia del Estado; su escala de valores es muy diferente a la del status quo. En el pasado, el discurso religioso del establishment era usado para, más o menos, mantener en resignación a la gente por las penurias de la vida. Pero, ante su debilitamiento, esas personas tienen hoy una manera distinta de entender y afrontar su existencia, pues ante la tenaza económica que les impide tener todo lo que la publicidad les ofrece constantemente, si alguno entre ellos logra,...