Por Jonathon Morgan y Ryan Foxredaccion@elcolombiano.com.co
Desde las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2016, en las que los agentes rusos influyeron a través de una campaña coordinada de desinformación en las redes sociales, plataformas como Twitter y Facebook han tomado medidas para abordar el problema. Miles de “títeres” con cientos de miles de seguidores han sido eliminados de Facebook, por ejemplo, y no pueden ser reconstruidos fácilmente. Twitter ha reducido el riesgo de que la propaganda se propague a través de cuentas automatizadas o bots.
Tales esfuerzos pueden estar ayudando. El consenso entre los investigadores que monitorean las elecciones intermedias de 2018 es que ha habido menos de la clase específica de interferencia...