Por Julián Andrés Duque O.Instituto Tecnológico Metropolitano, ITM.Ingeniería Electrónica, 8° semestrejulianduque128989@correo.itm.edu.co
Finalicé el bachillerato en el año 2008. Entre lecturas obligatorias, resúmenes y libros repetidos nunca oí una gran recomendación literaria por parte de los profesores ni mucho menos de algún compañero de clase; quizá por nuestra actitud, por desinterés de los educadores o por un endeble modelo educativo ante una lengua que cada vez tiene menos relevancia en las aulas (tema para otra ocasión), efecto más notorio en instituciones de carácter público.
No fue sino a finales de 2015 que descubrí a Gabo y me di cuenta del tiempo perdido en los años de colegio, tantas clases de español de las cuales no recuerdo...