Parece que ‘Jesús Santrich’ intentó ingresar al universo de lo público a la usanza de los políticos colombianos: creyendo en los privilegios. Y lo hizo por la vía tradicional: sacando provecho de la norma, es decir, de los Acuerdos de La Habana.
¿Será que el caso ‘Santrich’ evidencia fallas en lo pactado? ¡Todo lo contrario! Este proceso judicial es una oportunidad para que el Estado demuestre el músculo de los acuerdos, desmienta las acusaciones de impunidad y responda así a la queja más frecuente de la oposición. Néstor Humberto Martínez declaró que la Fiscalía no sigue a otros miembros del partido Farc (cada quien con sus técnicas para calmar o alborotar avisperos).
¿Lo de ‘Santrich’ fue torpeza (¡Qué me van a estar vigilando estos gringos!)?...