Por STEVE ISRAELredaccion@elcolombiano.com.co
En los días que han seguido al peor tiroteo masivo en la historia de nuestra nación, tal vez la pregunta que más se están haciendo los americanos es “¿cambiará algo?”. La respuesta simple es no. La pregunta vital es “¿Por qué no?”.
El Congreso ya está haciendo lo que considera su parte. Las banderas han sido bajadas, pensamientos y oraciones twitteados, y en algún momento de esta semana se realizará el último episodio en el drama más largo de C-Span: el momento del silencio. Es como ha respondido a otros tiroteos masivos.
En mis 16 años en el Congreso, la revista Mother Jones ha contado 52 asesinatos masivos. Pocas lecciones sobre el Congreso fueron más duras que las que aprendí sobre por qué, después...