En las universidades públicas colombianas existen deficiencias de representación y participación en los consejos universitarios, especialmente en el Superior y el Académico. Si uno compara los tipos de gobierno universitario y el número de representantes de los profesores, estudiantes y administrativos en los organismos de dirección de algunas universidades del mundo con lo establecido por la Ley 30 de 1992, puede ver de qué manera nuestro gobierno universitario es cerrado, débil democráticamente y elitista.
Según la Ley 30, el Consejo Superior Universitario es el máximo órgano de dirección y gobierno de la universidad y está integrado por nueve miembros. Este sistema no es democrático porque en muchos procesos de nombramiento de rectores ha...