Por JUAN SEBASTIÁN PUERTA P.Universidad Pontificia BolivarianaFacultad de Economía, 1° semestre @GEUPB
Uno de los actos más nobles que podemos hacer los seres humanos es cuando se dona un órgano para que alguna persona, muchas veces desconocida, pueda sobrevivir a una grave enfermedad. Tanto los donantes voluntarios, o sus familiares, como los beneficiados crean un lazo de agradecimiento que dura, literalmente, toda una vida.
Pero, ¿qué pensaría usted si asesinan a alguien con premeditación para obtener sus órganos? ¿Acaso no se estaría cambiando la posibilidad del ser humano de hacer de la donación de órganos un acto de la mayor nobleza a uno de la mayor vileza?
Recientemente David Matas, abogado de derechos humanos, y David Kilgour, ex secretario...